A propósito de lo sucedido hace unos días atrás sobre la legalización del matrimonio homosexual. Hay cristianos que usan la santidad como excusa para la discriminación.
Antes de empezar esta reflexión quiero dejar claro que LA BIBLIA ENSEÑA QUE LA HOMOSEXUALIDAD ES PECADO y yo no pienso lo contrario. Textos como Levítico 18:22; 20:13; Romanos 1:26-27; 1 Corintios 6:9; Apocalipsis 21:8; 22:15 entre otros lo enseña claramente.
Ahora bien, TODOS por igual somos pecadores necesitados de la Gracia de Cristo. La persona que no es gay o lesbiana, o pedófilo o asesino o violador o ladrón no es mejor que ellos ante los ojos de Dios. Una persona "moralmente buena" esta tan condenado al infierno como las personas "moralmente malas", ya que por muy buenos que seamos ante los demás, a ojos de Dios "Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque."(Eclesiastés 7:20, ver también Romanos 3:9-18). La diferencia es que los cristianos nacidos de nuevos hemos sido salvos por fe sin mérito de nuestra parte, hemos sido limpios por la Sangre de Cristo y hemos recibido el Espíritu Santo quien ha transformado nuestros corazones y nos ha hecho nuevas criaturas (1 Corintios 6:11; 2 Corintios 5:17)
La persona renovada por el Espíritu le indigna el pecado. Es lo que sucedió con Pablo cuando visitó Atenas en uno de sus viajes. La Biblia dice "su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría" (Hechos 17:16). Para el cristiano convertido, ver la inmoralidad, la incredulidad y la ley de Dios siendo pisoteada le provoca molestia y enojo y es normal. Ver parejas del mismo sexo demostrándose afecto nos impacta, nos provoca rechazo y esta bien. Sin embargo si nosotros estuviéramos en el lugar de Pablo ¿Como reaccionaríamos? ¿Qué le diríamos a los atenienses idólatras? Estoy seguro que la mayoría de nosotros actuaríamos como los fariseos cuando Jesús no se comportaba según sus estándares. Tal vez diríamos "Ustedes son unos idólatras y van a arder en el infierno", o cuando el fariseo Nicodemo fue de noche a Jesús le diríamos "¿Qué haces aquí, generación de víbora?"
¿Como reaccionó Pablo? El versículo 22 dice que comenzó su discurso con estas palabras: "Atenienses, en todo observo que sois muy religiosos" Pablo no lanzó ataques condenatorios, en cambio hizo notar su (aunque equivocada) religiosidad. Pablo sabía que una actitud hostil cerraría sus corazones al evangelio.
Pablo usó algo que les era conocido, algo a lo que estaban acostumbrados, algo familiar para despertar el interés de sus oyentes: "pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio." Pablo aprovecha esta instancia idolátrica para poder hablarles del Dios verdadero.
No es mi intención dar estrategias de evangelismo. Solo quiero contrastar la actitud de Pablo con la de muchos cristianos modernos en relación a los homosexuales. Es común entre los cristianos modernos tratarlos de "asquerosos", "sucios", e inclusos usan palabras fuertes. Al ver y escuchar a estas personas da la impresión que están usando su cristianismo para disimular su homofobia, usan la santidad como excusa para justificar su intolerancia. No demuestran tener un corazón santificado ni transformado. Levantan prejuicios innecesarios y cierran las oportunidades de que ellos escuchen el evangelio que les permitirá ser salvos y cambiar sus vidas acorde a la voluntad de Dios.
¿Que debemos hacer o como debemos reaccionar si queremos demostrarles amor pero sin tranzar lo que creemos acerca de la santidad? PRIMERO no debemos discriminarlos, examine su corazón y pídale a Dios que lo cambie si ve en usted actitudes de homofobia e intolerancia. SEGUNDO, no tema compartir ni formar lazos de amistad cuando conozca a un gay o lesbiana, ellos "no muerden" ni les van a pegar ninguna enfermedad rara por conversar con usted. Recuerde que Jesús fue llamado "amigo de prostitutas y pecadores", si usted evita a estas personas por causa de su "santidad" esta diciendo que es más santo que Jesús. TERCERO la mayoría de estas personas, por lo menos la que he tenido oportunidad de relacionarme, son respetuosas especialmente si se sienten en confianza. Si usted invita a su casa, o incluso a su iglesia a una persona o pareja homosexual, ellos tendrán la deferencia de no mostrar afectuosidad entre ellos o alguna conducta inapropiada. CUARTO, luego que han ganado su confianza hábleles del amor de Dios, invítelo(s) a estudiar la Biblia. Deje que el Espíritu Santo haga la obra en sus corazones. Recuerde siempre que no es usted sino Dios quien hace la obra de transformación. QUINTO, no tema decir la verdad con amor. En algún momento usted tendrá que decir lo que piensa del homosexualismo y enseñar lo que la Biblia dice sobre el tema. En ese momento la persona se ofenderá, tal vez se enojará con usted y pensará que usted es un homofóbico. Hágale saber que lo ama tal cual es y que no es su intención discriminarlo ni herirlo, pero por que lo ama no quiere que termine en el infierno y debe decirle la verdad por su salvación. En este punto es muy probable que la persona quiera romper lazos con usted, si lo hace, es su decisión, usted ya cumplió con su parte. POR ULTIMO PERO LO MAS IMPORTANTE aprenda del Maestro, de su trato con las personas, asimile Su carácter y deje que sea Él quien lo utilice para llegar a estas personas. Ore más, estudie más.
No dejemos que el prejuicio sea un obstáculo para que los gays, lesbianas, transexuales y otras personas discriminadas puedan conocer el evangelio, ser transformadas y gozar de la vida eterna que nosotros, solo por gracia y tan pecadores como ellos, ya gozamos por la sangre de Cristo.
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